De siempre ha funcionado el boca a boca, las recomendaciones, lo cual es lógico porque tener una referencia positiva de algún conocido da cierta confianza. Yo indagaría un poco más sobre cada una de esas recomendaciones, que aunque bienintencionadas, puede que no coincidan con lo uno debe
esperar de una consulta de salud mental.
Para darte los siguientes consejos me baso en mi experiencia
como terapeuta -llevo más de 18 años acompañando a miles de personas con sufrimiento mental de todo tipo- y en las impresiones que a lo largo de este tiempo han compartido conmigo estas personas.
Pero sobre todo me quiero guiar por mi propia experiencia como cliente.
Durante más de 4 años estuve recibiendo psicoterapia y tuve la oportunidad de aprender “desde el otro lado” todo lo que me parecía verdaderamente relevante y que cambiaron mi perspectiva profundamente.
Poder estar en esta situación es lo que me ha hecho experimentar “en mis propias carnes” qué cualidades apreciaría como más valiosas en un profesional.
Ahí van las 3 principales claves a considerar:
1.Que tenga crédito profesional
Esto parece una obviedad, pero es importante comprobar que el profesional haya pasado por una formación especifica de la salud, principalmente psicólogo o médico, en una institución reconocida con programas de formación acreditados, que cumplen parámetros de rigor y de calidad.
Que disponga de cierta experiencia es siempre un grado. Que disponga de vocación de servicio o motivación por ayudar a los demás.
2) Que tenga un interés genuino por mí.
Esto se manifiesta a través de sentir que me escucha activamente, con empatía, siempre desde el respeto, en un ambiente que favorece la confianza, en una clara disposición de confidencia, sin juzgar, mostrando una preocupación real por mis intereses (frente a otras preocupaciones particulares como intereses únicamente económicos o comerciales, conflicto de intereses con laboratorios farmacéuticos, intereses al servicio de su desarrollo académico o de investigación, aconsejar técnicas que no han demostrado su eficacia, búsqueda reconocimiento profesional ante el colectivo profesional correspondiente).
3) Que sea accesible desde lo pragmático.
O lo que es lo mismo, que no me cueste muchísimo trabajo acudir a terapia: por distancia a mi domicilio (si es consulta presencial), por no disponer de tiempo suficiente o incompatibilidad de horarios con mi rutina, por ser un esfuerzo económico desproporcionado etc).
